¿Quién no ha pasado por una pastelería o panadería y ha visto unos croissants en las vitrinas con el que se le ha hecho la boca agua? Pues hoy, os traemos una receta con las que vosotros mismo podréis haceros la boca agua, se trata de croissants al aceite de oliva virgen extra Clemen.
¿Quién no ha pasado por una pastelería o panadería y ha visto unos croissants en las vitrinas con el que se le ha hecho la boca agua? Pues hoy, os traemos una receta con las que vosotros mismo podréis haceros la boca agua, se trata de croissants al aceite de oliva virgen extra Clemen.
La ventaja de hacer los croissants nosotros mismos, a comprarlos, es que nosotros sabemos en todo momento que ingredientes son los que estamos utilizando para elaborarlos. Por lo tanto, sabemos que los ingredientes que estamos utilizando son más saludables que los que compramos ya hechos, pues estos últimos, viene con edulcorantes, conservantes entre otros que hacen que se mantengan en buen estado, pero no son tan beneficiosos para nuestra salud.
Antes de comenzar con nuestra receta, comentar que, el secreto de esa masa tan esponjosa y capeada de los CROISSANTS radica en un largo proceso de estirado, doblado y reposo, por lo que, es mejor empezar bien temprano a preparar la primera fase de la masa.
Elaboración
Lo primero que debemos hacer es disolver la en agua tibia la levadura junto con el azúcar y dejar reposar esta mezcla en un cálido de 10 a 15 minutos, hasta que haga espuma.
Luego, ponemos a calentar leche y le añadimos la sal y la mayoría del aceite de oliva virgen extra Clemen. Añadimos esta mezcla a las harinas previamente mezcladas junto a la levadura y removemos la masa muy bien. Cuando hayamos terminador de remover la masa, dejamos que repose durante 5 minutos y volvemos a amasar hasta que ésta, esté suave y elástica. Tapamos la masa y la dejamos fermentar de nuevo durante unos 90 minutos en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño. Pasado este tiempo, pasamos la masa a la nevera durante 20 minutos.
Pasado el tiempo de reposo, amasamos por tercera vez la masa, pero esta vez, tan sólo 2 minutos y la estiramos hasta formar un rectángulo de aproximadamente 30x15cm. Cogemos una brocha para cocinar y pintamos la masa con un poco más de aceite de oliva Clemen, doblamos la masa por la mitad, apretamos ligeramente los bordes y volvemos a estirar la masa para que adopte una forma ovoidal. Doblamos de nuevo la masa, esta vez en tres partes, la cubrimos con film transparente y la dejamos reposar en la nevera unos 10 minutos.
Repetimos el proceso anterior, de pintar y doblar la masa dos veces más y dejamos enfriar de nuevo 90 minutos más.
Pasado los 90 minutos, estiramos la masa y la cortamos en 4 rectángulos de 7x9cm aproximadamente. Cortamos estos rectángulos diagonalmente en dos y enrollamos cada triángulo empezando por el borde más ancho, los ponemos sobre una bandeja de horno con papel especial. Metemos la bandeja en el horno sin encender y dejamos reposar 1 hora.
Por último, pintamos con la yema, un poco de agua y sal los croissants y los horneamos a 190 grados durante 15-20 minutos.
¡Listo! unso deliciosos croissants de aove saludables y riquísimos.
Nota: Esta receta está pensada para 8 unidades.